La vida se resume en momentos: un helado de chocolate a punto de derretir, los segundos quietos antes de una tormenta de verano, una sonrisa que se escapa en la multitud…una sonrisa. A ver, les voy a contar de una boda civil, y los momentos que la pareja nunca olvidarán.
Después del éxito del mercadito en el MIN, los extranjeros se sentían más en casa, acogidos en un país que nunca habían conocido. La boda civil era en El Hatillo, y seguíamos esforzándonos por mantener ese ambiente íntimo y hondureño.
Momento: la unión de dos nuevas familias. No era una fiesta normal, sino una gran bienvenida a la novia y su familia. En honor a la abuela del novio—que en paz descanse—tratamos de recrear el entorno de su casa, adaptando las decoraciones y los detalles a la memoria de la querida Tita.
Momento: visitando la casa de la abuela. La vajilla familiar decorando los buffets, bases de plata de la abuela, muebles transportados a la montaña, incluso las lámparas y su destello insinuaban ese vení a visitar mi casa. La abuela no estaba allí, pero si lo estuviese, hubiese estado muy feliz, lista para darle la bienvenida a una integrante nueva de la familia. En esos detallitos se sentía su alma.
Momento: los novios fueron lanzados al aire por sus invitados.
Momento: disfrutar el simple gusto de un single malt whiskey de primera calidad. Todos los muchachos de la familia son aficionados del whiskey: el novio, sus hermanos, el cuñado, el amigo del amigo del amigo–¡hasta mi esposo le encanta!
Momento: una bailadera interminable. Aunque la boda era chiquita e íntima, los invitados estaban tan alegres que no dejaron nunca de bailar. La boda fue afuera, bajo un árbol que observaba los acontecimientos de los actos civiles. Ese jardín natural, contando con arboles lindos, altos y maduros, no necesitaba decoración. Las mesas llevaban flores blancas y verdes, especiales, algo que podrías encontrar en casa.
Momento: dos enamorados prometieron compartir las felicidades que les esperaban.
Y así se fue la noche, en momentos compartidos y privados, momentos de alegría y celebración, momentos que la novia y el novio guardarán por el resto de sus vidas juntos.
Fotografía por Daniel Mendoza
Flores por Leonte Rueda
[…] no se destaca por sus similitudes—las tendencias y las modas que rigen por ratos—sino por los momentos excepcionales, los que se definen en trazos gentiles y de simple […]
[…] acogieron y me dieron la libertad para expresar creatividad. Tardes encantadas, bodas descalzas, momentos capturados, elegancia, cielos de lucecitas, bodas disfrazadas de rojo, bodas en casa, bodas tradicionales, […]