En nuestro mes de las bodas, les comparto un consejo sobre el horario del día de la boda. Me parece indispensable que las novias se sientan relajadas y seguras de si mismas mientras planeamos, mucho más en la culminación de los planes. Una novia relajada es una novia feliz.

Un Consejo para las Novias

Finalmente, ¡el día que tanto has esperado esta aquí! Amaneces con pajaritos cantando, los rayos de sol jugando con el aire mañanero…todo esta cargado de emoción, del inevitable suspenso en esas horas previas a la boda. No quieres que nada salga mal. Por eso es importante crear y apegarte a un horario con tu maquillista y tu estilista.

Lo primero: si tu maquillista/estilista también esta encargada de tus damitas, cualquier cambio en horario crea un efecto dominó, pues al tardarse con una, se tarda con la siguiente y la siguiente…me entiendes.
Si tu maquillista/estilista llega tarde significa que todas las actividades antes de la boda se postergan. Las fotos con tu mama o en tu vestido al terminar de arreglarte cambian dependiendo de la luz del día. Este detalle es importantísimo! La luz natural es necesaria para los fotógrafos, especialmente si quieres fotos al atardecer, como las de Ale y Romain.

Las fotografías más lindas tienden a ser en esta hora dorada; los fotógrafos buscan esa luz efímera, esa luz única que captura la belleza de la pareja, de los vuelos del vestido blanco y la sonrisa de un novio feliz. Esta foto de Andrea y Jaime fue posible por la iluminación perfecta de un atardecer isleño.

También quiere decir que tu estarás lista antes que tus damitas, si comparten maquillista/estilista. Ellas se van a tomar fotos más tarde, mientras tu esperas. La situación siempre concluye en la siguiente decisión: empezar la boda tarde, o empezar a boda sin tus damitas.
Y si la maquillista/estilista tiene quince personas que arreglar, ¿incluyendo a Tía Teresa y a la Abuela Lupita?
Este es mi consejo para la novia, cuando se trata de crear ese horario con tu maquillista y tu estilista.

Organiza bien el horario con la maquillista y el resto del cortejo.

Tus tías, las mamas—ellas también se pueden arreglar con estos profesionales, pero que sean personas que no perjudiquen el horario de la misa. Para tus damitas, mejor contrata otro maquillista/estilista, o refiérelas a expertos para que ellas decidan.