Como bienvenida a los invitados estadounidenses de una boda reciente, decidimos organizar un pequeño mercadito en el Museo Para la Identidad Nacional. Fue un almuerzo típico, seguido por un bazar de productos artesanales y catrachos. Sigue leyendo y conoce el mercadito hondureño…
¿Qué palabras usamos al describir nuestra Honduras? ¿Cómo introducirle a nuestros amigos extranjeros las riquezas de una cultura mestiza? ¿Como explicar en solo unos cuantos días el ambiente hondureño? ¿Qué es Honduras?
Pues para mi…
Honduras es un cafecito de palo humeando en el frío de las mañanas capitalinas. Honduras es el pan casero: rosquilla, tustaca, la semita de las cuatro.
Honduras es la playa libre, arena como sudor de cal, agua tibia y azuleja. Honduras es flora silvestre y bosque salvaje—somos un país verde.
Honduras es patrimonio: el Indio Lempira, telas Lenca, esencias de La Mosquitia, rosarios de barro, un mundo Maya.
Una Tarde en El Mercadito
Y al honorar lo que es verdaderamente hondureño, se nos hacía indispensable volver al centro histórico, al Museo Para la Identidad Nacional, donde se celebró un almuerzo íntimo y acogedor. Honduras es celebración: la familia quería darle una bienvenida especial a los viajeros y fue en éste espíritu que creamos el mercadito.
Allí, en el patio del MIN, entre la multitud de flores del Lago de Yojoa, los invitados disfrutaron de un almuerzo tradicional.
Habían horchatas y jugos naturales, café de Galeano, elote loco, pupusas de quesillo, guacamole, quesos en extravagancia, encurtidos y chimichurris y cualquier otra delicia hondureña.
Después del almuerzo, los invitados podían recorrer el mercadito de productos hondureños. Nos visitó Enrollarte, que ofrecía salidas de baño y otros accesorios para la playa.
Contamos con la presencia de Casa Petipuá, con una variedad de líneas de productos, incluyendo jabones de The Botanist y detallitos de Vonne.
¿Y como olvidar las babuchas de Mayan Roots y las camisas de Galeano?
El mercadito hondureño fue un pedacito de nuestro país que logramos compartir con los invitados extranjeros. No dudo que regresarán a descubrir todas las bellezas de mi querida Honduras.
Fotografía por Daniel Mendoza
Amo Honduras, qué linda manera de darla a conocer (y de contarnos la historia)!
¡Hermoso y orginal concepto!
La felicito Ana María, Usted como siempre, innovando y haciendo los mejores eventos.
Me encanta siempre, seguirla en sus nuevas públicaciones.
¡Dios la bendiga!
¡Felicidades!
Extraordinaria manera de hacer Patria.
La felicito! Todo está presentado con muy buen gusto!
Hermoso todo 🙂
Bello todo Anamaria, como siempre un gusto exquisito. Mostrando lo mejor de lo nuestro. Felicidades.
[…] del éxito del mercadito en el MIN, los extranjeros se sentían más en casa, acogidos en un país que nunca habían […]
[…] otras ocasiones, había organizado eventos allí, pero para la boda civil, me imaginaba algo completamente diferente. Una boda civil como […]